Una visión clara y realista del estado financiero en el que se encuentra una empresa es imprescindible no ya sólo para asegurar el buen curso de sus eventuales operaciones, sino para garantizar su permanencia en el futuro más inmediato. En este sentido, el Ratio de Liquidez es un instrumento fundamental para examinar la salud económica de una empresa y contar con datos fiables que permitan diseñar una planificación eficaz.
Definición y cálculo del Ratio de Liquidez
¿Qué es, en definitiva, el Ratio de Liquidez? Se trata de un indicador que calcula la capacidad que tiene una empresa para afrontar sus pagos a corto plazo, es decir, antes de un año.
Relaciona dos magnitudes económicas diferentes:
- Por un lado, tenemos lo que se denomina Activo Corriente o Circulante. Aquí se encuentran tanto las cuentas de dinero en efectivo de que dispone la empresa (tesorería) y las existencias como los derechos de cobro y otras partidas que pueden convertirse antes de un año.
- Por otro lado, nos encontramos con el Pasivo Corriente o Circulante, que son todas las deudas y obligaciones que la empresa debe cumplir antes de un año.
El resultado de dividir el Activo Corriente entre el Pasivo Corriente es el Ratio de liquidez. Se trata de un indicador estrechamente relacionado con el Fondo de Maniobra (diferencia entre AC y PC), ya que determina el margen financiero con el que la empresa cuenta para llevar a cabo su actividad a un año vista.
¿Cómo se interpreta el Ratio de Liquidez?
Ratio de Liquidez es mayor que 1
Se da esta situación cuando el Activo Corriente supera al Pasivo Corriente, lo que implica un saludable estado económico de la empresa para financiarse en el corto plazo. No obstante, puede darse la circunstancia de que la empresa cuente con un exceso de activos líquidos, lo que supondría una infrautilización de recursos financieros por los que no se está obteniendo ninguna rentabilidad. Este hecho puede interpretarse como una señal de que la empresa necesita encontrar nuevas oportunidades de inversión.
Ratio de Liquidez es menor que 1
Cuando el Activo Corriente es inferior a la cifra del Pasivo Corriente significa que la empresa no puede hacer frente a sus pagos más inmediatos, o al menos puede verse en serias dificultades para afrontarlos, ya que su liquidez actual no es suficiente para cubrir todas las deudas antes de un año. En cualquier caso, el Ratio de Liquidez es un indicador del estado de salud financiero y no una condena irrevocable. La empresa con un exceso de activo tiene a su disposición varias herramientas para conseguir liquidez a corto plazo, ya sea mediante la revisión de los gastos internos o las estrategias para aumentar el volumen de ventas.
Ratio de Liquidez es igual a 1
Si el Activo Corriente y el Pasivo Corriente coinciden, la empresa cuenta con la capacidad exacta para cumplir con sus obligaciones de pago, pero no dispondrá de margen de maniobra para otras operaciones a corto plazo o contingencias a las que haya que hacer frente. En cualquier caso, el Ratio de Liquidez es un indicador del estado de salud financiero y no una condena irrevocable. La empresa con un exceso de activo tiene a su disposición varias herramientas para conseguir liquidez a corto plazo, ya sea mediante la revisión de los gastos internos o las estrategias para aumentar el volumen de ventas.
En cualquier caso, sea cual sea el resultado, las implicaciones del Ratio de Liquidez afectarán de manera distinta a cada empresa de acuerdo con su modelo de negocio específico.
¿Qué es el Ratio de Liquidez Inmediata?
Si lo que buscamos es determinar la capacidad de respuesta financiera real de nuestra empresa ante casos imprevistos, el indicador que necesitamos es el Ratio de Liquidez Inmediata.
En este caso lo que ponemos en relación es sólo nuestra tesorería frente a todo el Pasivo Corriente, de manera que obtendremos nuestro margen de maniobra teniendo en cuenta los activos líquidos que se encuentran inmediatamente a nuestra disposición, sin necesidad de ser convertidos.
Por lo general, se admite que un resultado de entre 0,20 y 0,30 es un Ratio de Liquidez Inmediata aceptable, ya que permite tanto el pago de deudas próximas como una recuperación rápida del flujo de liquidez.