Toda información de cualquier empresa o negocio necesita de una base de datos capaz de almacenar cada dato relevante para la misma. Las bases de datos son la herramienta perfecta para poder organizar la información con el fin de que sea mucho más fácil de gestionar. De esta forma, la empresa podrá revisar cómodamente cualquier aspecto relacionado con los datos almacenados de manera más rápida y accesible.
Cada artículo, comentario, registro o dato obtenido a través de las interacciones online de la empresa con sus usuarios se guardará en la base de datos elegida para hacer un uso más eficiente de toda esa información. Y es justo por esto mismo que muchos empresarios necesitan conocer las diferencias entre base de datos relacional y base de datos no relacional con el fin de elegir el modelo que mejor se adapte a sus necesidades.
Base de datos relacional
Base de datos no relacional
Una base de datos relacional se caracteriza por ordenar la información de manera organizada mediante la utilización de tablas relacionadas entre sí. Cada una de las tablas que conforma la base de datos se encuentra relacionada con el único objetivo de facilitar el acceso a los datos para conseguir la información o modificar su orden según interese. Este tipo de bases de datos son las más utilizadas por grandes empresas y entidades financieras.
El lenguaje que se utiliza para acceder a dicha información es el conocido como SQL o Structure Query Language. Mediante el correcto uso del SQL, se podrán modificar y alterar los datos obtenidos gracias a un sistema de identificación de tablas para que, en todo momento, exista un control sobre aquello que se quiere revisar o modificar. Un claro ejemplo de los formatos de este tipo de tablas son el de Excel o el de Access.
Las bases de datos relacionales ofrecen a la empresa un sistema de almacenamiento mucho más robusto y seguro que una base de datos no relacional. Entre las bases de datos relacionales más usadas se encuentran MySQL u Oracle.
Como su propio indica, una base de datos no relacional es aquella que está diseñada para modelos de datos específicos que no necesitan o no cuentan con una relación entre sí. Así, cada una de las tablas de información creadas funcionan de manera independiente para facilitar su uso. Esto también implica que no utilizan el lenguaje SQL para funcionar, por lo que también se las conoce como bases de datos NOSQL.
Precisamente es esta esta sencillez y facilidad de acceso y orden entre los datos lo que las convierte en una de las primeras opciones para muchas empresas que no necesitan de un orden estricto y que buscan una mayor funcionalidad. Evidentemente, al contrario que una base de datos relacional, estas son menos fijas y, por lo tanto, menos seguras.
Aquí la información se almacena en formato de documentos, mucho más práctico si no se cuenta con un esquema prefijado de aquello que se quiere almacenar. Así, los sistemas de gestión de bases de datos no relacionales más utilizados son MongoDB o Redis.
Qué base de datos utilizar según el tipo de empresa
Antes de decidir cuál es el modelo de base de datos que mejor encaja con el negocio, es importa saber cuándo se utiliza, generalmente, cada una de ellas.
Así, podemos decir que una base de datos relacional es aquella que se usa cuando el volumen de datos crece de manera lenta o inalterable de modo que, con un único servidor, sea posible almacenar todo lo necesario. Además, los usuarios que acceden a la misma lo utilizan siempre de forma regular sin picos de uso elevado.
En cambio, una base de datos no relacional es mucho más útil cuando se manejan grandes cantidades de datos diferentes y complejos. Esto quiere decir que la frecuencia en que cambia la información es mucho más alta y, por lo tanto, es imposible prever cual será la actividad en referencia a su uso por los usuarios.
Las medianas y pequeñas empresas han empezado a optar por las bases de datos NOSQL para gestionar su información. Así que, si se es una PYME o un empresario autónomo, es mucho mejor empezar desde cero y elegir un sistema mucho más libre que se ajuste a los constantes cambios del mercado actual.