A estas alturas, cualquiera que haya dedicado unos minutos a navegar por internet, ya sea desde el móvil o en un ordenador, habrá caído más de una vez en un clickbait. ¿Pero sabes qué es el clickbait exactamente? Esta práctica, que tiene generalmente una fama marcadamente negativa, puede ser también una técnica que usar para mejorar las visitas a una web sin perder por ello calidad de contenido o ver manchada su imagen. La clave, como ocurre con todas las herramientas, es el cómo se usa.
Qué es el clickbait
Cuando hablamos de clickbait, o clickbating, nos estamos refiriendo a una técnica para conseguir que los usuarios hagan clic sobre un enlace para aumentar el tráfico a una web y conseguir así dinero mediante la publicidad.
Esto se hace mediante la elaboración de titulares muy llamativos, que apelan casi siempre a la curiosidad del lector de forma que no pueda evitar hacer clic en el enlace. El problema del clickbait es que ha sido usado y abusado ampliamente en internet, y de hecho se sigue haciendo un extendido mal uso de él, recurriendo en exceso al sensacionalismo o a los trucos psicológicos para, al final, frustrar al usuario pues tras clicar, casi siempre ve defraudadas sus expectativas.
Ventajas y desventajas del uso del clickbait
El uso del clickbait puede reportar tanto ventajas como desventajas en función de la puesta en práctica, aunque algunas de sus características tanto positivas como negativas son prácticamente inherentes a la técnica en sí.
VENTAJAS
- Aumento de tráfico. El uso del clickbating genera visitas, eso es indiscutible. Los titulares escritos así son más atractivos y tienen un mayor poder de atracción, además de ser mucho más compartidos y difundidos en redes sociales.
- Difunde la imagen de marca. Como es lógico, una mayor visibilidad en las redes y los medios provoca el correspondiente crecimiento de la imagen de marca.
- Bien usado, mejora el SEO de tu web, potenciando aún más la llegada de nuevas visitas y alimentando así el tráfico muy notablemente.
INCONVENIENTES
- Sensacionalismo. El abuso del sensacionalismo en los titulares no aporta valor y genera rechazo en muchos perfiles.
- Usuarios de baja calidad. El tráfico generado por el clickbating, aunque de gran volumen, suele ser de calidad baja, teniendo un índice de rebote alto y un tiempo de permanencia reducido.
- Imagen de marca perjudicada. Si una marca se asocia demasiado a ese tipo de estrategias puede acabar con una imagen perjudicada.
- Google y Facebook pueden penalizarte. Algunas plataformas están devaluando los contenidos clickbait, pudiendo posicionar peor.
Cómo funciona el clickbait
Los métodos concretos para conseguir este efecto de llamada de atención están más que estudiados, y funcionan explotando características de nuestra psicología que son inherentes a prácticamente todos nosotros.
Se trata de estimular la curiosidad generando suspense e incertidumbre. Esto provoca naturalmente en la mente humana la necesidad de resolver la incógnita, y por ello es común “caer en la trampa” y acabar clicando.
Para ello se usan habitualmente pronombres directos, listados (frecuentemente impares, pues tienen más efecto) y verbos en forma imperativa para dirigirnos al usuario invitándolo a hacer algo.
Una forma de usar el clickbait para ganar visitas sin perder por ello la confianza del usuario ni la calidad de contenido es usar este tipo de titulares para atraer su atención pero ofreciendo luego un contenido de valor a la altura de las expectativas generadas, que evite en todo momento la sensación de frustración o decepción habitual ante un titular exagerado que prometía información llamativa y ofrece una explicación común y sencilla después.
Las listas son una de las mejores herramientas posibles, pues tienen la capacidad de ofrecer una gran cantidad de información en muy poco espacio, y que Google además valora en gran medida a la hora de posicionar.